15.02.2022
El intendente municipal envió un proyecto de ordenanza para avanzar en esta iniciativa que prohíbe la fabricación, comercialización o colocación de caños de escape libres.
Esta semana, el departamento ejecutivo municipal envió al Concejo Deliberante un proyecto de Ordenanza para prohibir el uso y comercialización de caños de escape modificados que generen ruidos por encima de lo normal. La medida responde a un pedido de los vecinos, que se ven afectados por este accionar.
El proyecto busca regular aquellos vehículos que presentan una alteración antirreglamentaria en su estructura para generar ruidos o estruendos, circulando por fuera de los parámetros exigidos por las normas nacionales y provinciales, generando contaminación sonora y afectando el bienestar de la población en general.
En tal sentido, la normativa prohíbe la circulación “con caño de escape libre o sin silenciador, con caño de escape no original, con escape modificado en su forma de fábrica con los llamados ‘sistemas expansivos’ utilizados para emitir ruidos fuertes y molestos o con cualquier accesorio colocado con aptitud para efectuarlos, y/o con silenciador defectuoso por su uso y/o desgaste que en razón de su estado deficiente no atenúe debidamente el ruido del motor”.
Además, prohíbe la fabricación, comercialización o colocación de caños de escape libres (sin sordina), no originales, con instalador de corte o limitador de revoluciones por minuto orientados a producir contra explosiones, o intervenidos de cualquier forma para emitir ruidos fuertes o evitar la correcta atenuación del sonido del motor en todo el Partido de San Nicolás de los Arroyos.
Finalmente, el proyecto autoriza al Municipio a destruir los caños de escape adulterados y retener la licencia del conductor y su vehículo, hasta tanto no se ponga en condiciones con las piezas homologadas para reparar el sistema de escape de la unidad a cargo del infractor.
El tratamiento del proyecto de Ordenanza está previsto para el jueves 24 de febrero, en sesión extraordinaria; y ya cuenta con el apoyo de todos los concejales oficialistas, lo que permitiría aprobar su tratamiento y puesta en vigencia.