07/10/19
En el mundo de los triatletas, el entrenamiento no se negocia. Son tres las disciplinas que hacen necesitar una agenda precisa para llevar a cabo el día a día. Pero si a eso se le suma el trabajo, la crianza de Joaquín y Juan Martín, el reloj se va ajustando un poco más. Aunque a Carolina Dell´Orefice no sólo se las arregla con todo, sino que además se dio el lujo de clasificarse a un Mundial. Por eso aprovechamos que después de la experiencia de Niza decidió tomarse un respiro y nos sentamos a charlar.
Ser mamá, trabajar y entrenar para tres disciplinas. ¿Cómo se hace?
– Lleva mucha organización, pasión y apoyo de mi familia. Hernán, mi marido, mis hijos que siempre quieren verme correr carreras, mis padres, mis suegros, todos me dan una mano con todo. El trabajo es una cuestión natural, obvio que ser mamá también, el tema es entrenar. Pero estando organizada ya sé lo que tengo que hacer cada día y es más fácil. Si algún día se complica, tengo la opción del rolo de la bici en casa, así que me subo ahí o me voy a la cinta del gimnasio. Al tener todo planeado, se qué hacer con los tiempos. Más allá de eso, a veces haces malabares y terminas levantándote más temprano o acostándote tarde. Lo mismo con la comida, yo siempre fui de comer sano, entonces ya sé lo que tengo que comprar cuando voy a hacer las compras. Arroz, palta, huevos no faltan nunca, por eso no me genera stress el tema de la alimentación.
¿Cuál de las tres disciplinas te cautivó primero?
– A mí siempre me gusto el running, además de jugar al tenis. Corrí la primera de Ternium creo que 2005 y después estuve muchos años sin hacerla, en el medio me case, los chicos, la profesión, todo hizo que vuelva a correrla en 2014. Y después el grupo Black Team de Christian Cabrera, me fue llevando. Empecé de forma bien casera, nadando un ratito, después la bici. Hasta que una de mis amigas, que entrena conmigo, Cecilia Rubianes, se anotó para un medio y después de insistirme bastante me convenció para ir. Esto es algo que empezas y no podés parar, es una pasión realmente.
La primera vez dentro del triatlón para Carolina fue en octubre de 2016, en Rosario: “No quiero correr esto nunca más en mi vida” fue la primera sensación. A lo que agregó: “no podía moverme de todo lo que sufrí, encima ya estaba anotada para Nordelta en marzo del año siguiente y me preguntaba cómo iba a hacer para correrla”. Aunque sentenció: “La verdad que la competencia de Nordelta la disfruté, fui más preparada, ya sabía con que me iba a encontrar y me gustó mucho”.
Y de ese paso inicial, corto si se quiere ¿Cómo fue encontrarse clasificada a un Mundial?
-El año pasado a la carrera de Nordelta la preparé mucho. En realidad mi objetivo nunca fue clasificar, yo sólo quería bajar mi tiempo, cuestión que no iba a ser fácil. Tampoco era que estaba con la cabeza en el Mundial. Pero mis amigas me decían que iba a clasificar, que preparara la tarjeta para los viajes porque me tenían fe. Y se dio todo, me salió bien la carrera, le metí mucho sacrificio como normalmente lo hago, pero a esa carrera le metí todo.
El septiembre pasado no fue un mes más para Carolina, viajar a Francia, codearse en la coqueta ciudad de Niza con algunas de las figuras importantes del mundo del triatlón, sentirse parte de un Mundial, “para mí fue todo nuevo, todo fantástico, increíble” resume. A continuación, explicó como fue la competencia: “La carrera en si fue muy dura, no tanto el agua o la parte de correr, pero la bici sí. Muchas subidas y la bajada también, cosa que yo no estoy acostumbrada a hacer, por entrenar en la pista o en el rolo, pero la carrera, más allá de eso, fue divina”. También dejó lugar para la sorpresa: “Quedé shokeada cuando veía pasar a las de elite en la bicicleta, que te pasaban casi volando, todas andan rápido, no aflojan nunca. La movida que se ve, es espectacular, mucha gente alentando, pese a ser todo muy comercial. A mi me encantó”. Y eso lo deja perfectamente claro: “De tener la chance de clasificar primero y económica después de ir, volvería a repetir la experiencia”.
¿Cuánto tiempo se entrena para lograr algo así?
– En la semana son aproximadamente dos horas y media por día, los sábados cuatro horas, que es el fondo de bici, lo que más tiempo lleva y los domingos, una hora y media. Es lo que yo entreno siempre. Lo único que cambia es la intensidad, dependiendo lo cerca que esta la próxima carrera. Salvo que esté muy cansada, no dejo de entrenar ningún día, es una conducta de vida. El año pasado cambié de entrenador y ahora lo hago con Mario De Elías, que es triatleta de elite.
Es notorio como el lugar de la mujer en todos los ámbitos de la sociedad, también en el deporte, se ha ganado mayor protagonismo ¿Cómo lo vivís vos?
– Hoy se ve como la mujer ha ido avanzando en todos los ámbitos, por suerte también en el deporte. Me encanta que cada vez seamos más las chicas que practicamos triatlón o cualquier deporte. Se ve en San Nicolás como cada vez más mujeres deciden meterse en esto, es muy positivo. Yo soy bastante nueva, pero veo que antes las chicas eran muy pocas, era un deporte casi exclusivo de hombres, hoy creció un montón.
Más allá de las mujeres, también es notorio como ha aumentado la cantidad de gente que decide incursionar en el triatlón ¿Por qué crees que es así?
-Es general, pasa lo mismo por ejemplo con el running, antes no se veían tantas maratones. Generalmente arrancando corriendo, después para aflojar todo lo que corres te tiras al agua, le terminas agregando la bici y se termina haciendo muy entretenido. Una vez que empezas a entrenar, después queres mejorar, se modifica la alimentación y se termina haciendo un cambio de hábitos que te lleva a realizar otra forma de vida.
Desde el rol de mamá y siendo deportista, está claro que a los chicos van a estar incentivados de hacer deporte.
– Ellos saben que no hay opción, tienen que hacer deporte. Ellos hacen natación, en la semana y optimist, los fines de semana. A Joaquín, el más grande lo tengo muy enganchado con la pileta, entrena mucho y es muy competitivo.
Lo que se viene para Carolina en lo que queda del año es el olímpico de Baradero, luego, el primer fin de semana de noviembre, Nordelta y seguramente los 10k de San Nicolás. Para el año que viene ya está anotada en el IronMan de Punta del Este. “En realidad es medio IronMan, todavía no hice la competencia completa” pero eso también es un objetivo que mira de reojo y no duda: “Ya lo voy a hacer”.
Entre transiciones
Un ídolo: Mi papá, mi mamá y mi marido
Un referente de otro deporte: Roger Federer y Serena Williams
De las tres que practicas, disciplina preferida: Running
Lugar más lindo para entrenar: La costanera de San Nicolás
Competencia que volverías a correr: Nordelta, siempre la haría
Lugar que aun no corriste y te gustaria hacerlo: Pucón
Un lugar de San Nicolás: Mi casa
Una amiga del deporte: Cecilia Rubianes
Una amiga de la vida: las LL, ellas saben