César Luis Menotti lo había dejado afuera de la lista de 22 para el Mundial 78. Ese dato está en la primer página del Manual del Alumno Maradoniano. Pero al año siguiente el entrenador argentino incluyó a Diego Maradona en el plantel nacional que disputaría la Copa América 1979. En esa competición el astro de Fiorito -ya figura consular de la selección juvenil que se preparaba para el Mundial de ese año, a disputarse en Tokio- saldría a la cancha con el número 6 en su camiseta.
La Copa América 1979 fue la trigésima primera edición en la historia del torneo, y no tuvo una sede fija. Se disputó entre el 18 de julio y el 12 de diciembre de 1979, siendo el campeón Paraguay, que conquistaba por segunda vez la Copa América (la primera fue en 1953, en Perú) venciendo a Chile por mejor diferencia de gol tras empatar en el partido desempate. En la primera fase del torneo sudamericano se formaron tres grupos de tres equipos cada uno, con partidos tanto de local como de visitante, mientras que Perú, el último campeón, ingresó directamente en la fase semifinal. Argentina integró el grupo B junto a Brasil y Bolivia, quedando eliminado en primera ronda.
El Flaco Menotti integró a Diego al plantel de la selección mayor de aquella Copa América a partir de la derrota inaugural en el certamen, ante Bolivia en La Paz por 2 a 1. El número 10 en la lista de jugadores (un ensayo del entrenador para promover a nuevos futbolistas) había sido adjudicado al lateral cordobés Juan Carlos Bujedo, por lo que el único dorsal disponible para incluir a Maradona era el número 6, con el que salió al Maracaná de Río de Janeiro el 2 de agosto de 1979, ante 130.000 espectadores, con arbitraje del peruano Edison Pérez Nuñez. El seleccionado nacional cayó por 2 a 1 (goles de Tita y Zico para Brasil, descontando Hugo Coscia para Argentina).
Partido completo entre Brasil y Argentina en el Maracaná, el día que Diego usó por primera la camiseta número 6.
Días más tarde, más precisamente el 8 de agosto, la selección de Menotti recibía en el Estadio José Amalfitani a Bolivia. Allí el mejor futbolista de la historia volvería a lucir el número 6 en su espalda, en un equipo que alistó a Enrique Bernardo Vidallé en el arco: Eduardo Saporiti, José Daniel Van Tuyne, Daniel Alberto Passarella y Miguel Ángel Bordón, en la defensa: Jorge Gáspari, Pedro Larraquy y Diego Maradona, en la mitad de la cancha: Hugo Coscia, Sergio Elio Fortunato y Roberto “el Ropero” Díaz, integrando el terceto atacante. Por su parte Bolvia, dirigido por Ramiro Blacut, formó con Hebert Hoyos: Eduardo Angulo, Erwin Espinoza, Edgar Vaca y Ramiro Vargas: Miguel Aguilar, Carlos Aragonés, Carlos Borja y Erwin Romero: Windsor Del Llano y Jesús Reynaldo. El árbitro del partido fue Sergio Vázquez, de Chile.
A los 40 segundos de partido el capitán Daniel Passarella clava un zurdazo desde 35 metros para poner el 1 a 0. A los 15 minutos del primer tiempo aumenta Jorge Gáspari, luego de un extraordinario desborde y centro del “Ropero” Díaz, que en el sector derecho del área grande bajó Hugo Coscia para la entrada del volante quilmeño. A los 20 minutos del segundo tiempo Hugo Coscia redondeó una gran noche desbordando por la derecha, metiendo el centro atrás para que Diego Maradona controle el balón, se perfile para su zurda mágica y convierta con tiro bajo al palo izquierdo del arquero Hebert Hoyos. Fue el primer gol de Maradona para la selección mayor en partidos oficiales (ya le había convertido a Escocia en carácter amistoso).
Estos fueron los tres goles del seleccionado nacional ante Bolivia, el 8 de agosto de 1979, en el Amalfitani.
Fue 3 a 0 ante Bolivia para recuperar las chances en el grupo inicial de aquel certamen, victoria que de poco serviría al empatar luego el día 23 de agosto ante Brasil: 2 a 2 en el Monumental, con Bochini en lugar de Maradona, que estaba en Los Ángeles para jugar un amistoso preparatorio al mundial juvenil.
Partido completo Argentina 2 Brasil 2, en el Monumental, con Bochini en reemplazo de Maradona.
A manera de “yapa”, un compilado de goles de la selección argentina en 1979 (incluye partidos oficiales y amistosos).
El cierre musical está protagonizado por Soledad Pastorutti, que homenajeó al Diez invitándolo al escenario del Teatro Gran Rex para cantarle “Brindis”.