Se lanzó la Mesa de Barrios Populares
19.08.2019 El pasado viernes por la tarde, en el local de CTA en calle Ameghino y Maipú, militantes, referentes del Movimiento de Trabajadores Excluidos (MTE) convocaron a vecinos de los 17 llamados “barrios populares”, para crear una mesa de trabajo y de manera conjunta, abrir un canal de diálogo con el municipio. Para hacer valer los derechos a la urbanización de los barrios en todos sus servicios, documentación legal de los terrenos y demás necesidades básicas para una vivienda digna: Se charló sobre el Certificado de Vivienda Familiar como una documentación fundamental a obtener y sobre un censo que viene realizando las militantes cartoneras del Movimiento de Trabajadores excluidos.
Hablaron Gerardo Sola, Rocío Arzagot como referentes del MTE, los abogados Valeria Benítez integrante de la Mesa por Memoria y Justicia de San Nicolás y el doctor José Luis sino. También Margarita, la cartonera encargada del importante trabajo de censo en los barrios populares y finalizaron los vecinos dando testimonios de su experiencias personales, conmovedores algunos a tal punto de llegar a las lágrimas.
Rocío Arzagot es referente del MTE y coordinadora de la Mesa local de Barrios Populares y el Certificado de Vivienda Familiar.
“Censo nacional de población del 2010, más de 500 mil hogares se encuentran en una situación de tenencia irregular de la vivienda. Lo que involucra a más de un millón de habitantes en toda la Argentina. Según el relevamiento de barrios populares llevado a cabo por organizaciones sociales entre agosto de 2016 y mayo del 2017 existen más de 4.428 barrios populares en toda la Argentina (villas, asentamientos), 17 en San Nicolás”.
“Estos barrios se constituyen con diferentes estrategias de ocupación del suelo, presentan distintos grados de precariedad, un déficit en el acceso formal de los servicios básicos como la red de agua, luz, cloaca y gas. La mayoría levantaron sus casas pero no tiene el título de propiedad de la tierra, lo que lleva a la precarización y limitación al crecimiento de infraestructura y de calidad de vida, ya que no saben los habitantes de los barrios populares, qué pasará con ellos, con el espacio que ocupan. Viven en constante incertidumbre. También existe la realidad de las empresas privadas, quienes no quieren invertir en lugares como los barrios populares debido a la precariedad de los terrenos y su legalidad. A pesar de que los vecinos habitan los lugares desde varias generaciones”.
“Según el artículo 14 de la Constitución Nacional es obligación del Estado garantizar la existencia de condiciones legales que permitan el acceso a una vivienda digna. En el año 2017 a partir de un Decreto se crea el Registro Nacional de Barrios Populares, San Nicolás cuenta con 17 barrios populares: Las Mellizas, Cavalli, Provinciano, Moreno, San Jorge, Avamba´e, Don Miguel, Santuario, Martínez, Evita, Pescadores, La Papelera entre otros. A partir de ese decreto se realizó un CENSO, en este caso la relevadoras fueron dos militantes del MTE y cartoneras, Margarita y Leonela, pasan casa por casa con una aplicación telefónica que les permite saber a través de un GPS, dónde están ubicados, la parte de suelo o lote que le correspondería a la familia censada.”
“El Certificado de Vivienda Familiar es un documento que otorga el Estado para poder iniciar un proceso de regulación dominial, para frenar cualquier tipo de desalojo y obtener los servicios formalmente. Hay ejemplos de vecinos que se han dirigidos solo y los han tenido a las vueltas y no han obtenido los resultados esperado y que avala el certificado, por eso planteamos la acción colectiva, para esto estamos creando esta Mesa de Barrios Populares, para hablar o reclamar los derechos manera conjunta al municipio”.
En el transcurso de la reunión Gerardo Sola aseguró a los presentes que si no se acompaña de manera colectiva y desde el compromiso personal, el Certificado de Vivienda queda reducido a un simple papelito. Los abogados asesoraron y quedaron a disposición de los vecinos para la obtención de recursos legales, las encargadas de los censos narraron sus experiencias y pasos a seguir, como así también los vecinos presentes contaron las malas y angustiantes experiencias que están viviendo en la actualidad, con respecto a la tenencias de las tierras y la precariedad de sus hogares.